Su composición va a lo esencial: manteca de cacao orgánica para nutrir sin engrasar, surfactante derivado de aceite de coco para hacer espuma y que el cabello esté suave al tacto y fragancia natural de té blanco y cítricos sin alérgenos para que te relajes mientras lo usas.
Humedece el cabello y frótalo con las manos hasta obtener una fina espuma o directamente sobre el cabello. Lavar y aclarar con agua. Úsalo de manera continuada y verás como tu cabello brilla y está mucho más sano.
En su laboratorio parisino, CIMENT fabrica jabones saponificados en frío. Este proceso artesanal minimiza el aumento de temperatura de los aceites vegetales que los componen, preservando así sus propiedades. Todos provienen de la agricultura ecológica. La glicerina, producida naturalmente durante la saponificación en frío, se conserva con su poderoso poder hidratante.
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